En un contexto global marcado por cambios constantes y tensiones geopolíticas, la posición de Canarias se vuelve cada vez más relevante. Eduardo Serra, exministro de Defensa de España, ha compartido su visión sobre la situación actual en una reciente conferencia en Las Palmas de Gran Canaria. A través de su análisis, se destaca la necesidad de que Madrid preste atención a la región, especialmente en relación con Marruecos, un país que ha mostrado intenciones expansivas en el norte de África.
La importancia de Canarias en el tablero geopolítico
Durante su intervención, Serra enfatizó que Canarias no solo debe ser vista como un destino turístico o un punto estratégico en el Atlántico, sino como un actor clave en la política exterior española. Según él, la historia reciente ha colocado a las islas en una posición de retaguardia, pero el panorama actual sugiere que Canarias puede convertirse en la vanguardia de las relaciones internacionales de España.
El exministro subrayó que el papel de Estados Unidos como aliado ha sido fundamental para la estabilidad de Europa y, por ende, de España. Sin embargo, con la llegada de Donald Trump al poder, se ha visto un cambio en la política exterior estadounidense que podría afectar a Europa y, en particular, a España. La retórica de «America First» ha generado inquietudes sobre el futuro de la cooperación internacional y la defensa colectiva, lo que podría tener repercusiones directas en la seguridad de Canarias.
Serra advirtió que la expansión de Marruecos podría llevar a una mayor presión sobre las islas, lo que hace imprescindible que el Gobierno español actúe con rapidez y determinación. La proximidad geográfica de Canarias a Marruecos convierte a las islas en un punto estratégico que debe ser protegido y defendido. En este sentido, el exministro instó a los canarios a estar atentos a los movimientos del país vecino y a exigir al Gobierno central que priorice las relaciones con Marruecos, así como la defensa de Ceuta y Melilla.
La necesidad de un enfoque coordinado en defensa
Otro de los puntos destacados por Serra fue la necesidad de incrementar el gasto en defensa, no solo en relación con Marruecos, sino en un contexto más amplio. La defensa nacional debe ser una prioridad, y el exministro argumentó que España ha incumplido sus obligaciones en el marco de la lealtad atlántica. La falta de inversión en defensa puede dejar a Canarias vulnerable ante posibles amenazas externas.
Serra también hizo hincapié en la importancia de mantener una política exterior coherente y estable. Cambios abruptos en la política exterior, dependiendo del partido que esté en el poder, pueden socavar la credibilidad de España en el ámbito internacional. La política de Estado, en lugar de la política de partido, es esencial para garantizar que las relaciones internacionales se mantengan estables y efectivas.
La polarización en el ámbito internacional
El exministro no solo se centró en la situación de Canarias y Marruecos, sino que también abordó la polarización que se vive a nivel internacional. La guerra en Ucrania, las tensiones en Gaza e Israel, y la retórica de Trump han contribuido a un clima de división que puede tener consecuencias negativas para la cooperación internacional. Serra advirtió que España, con su historia de conflictos internos, no debe fomentar la rivalidad ni la polarización en su propia sociedad.
La posibilidad de que Estados Unidos se retire de la OTAN fue otro tema que Serra consideró alarmante. La idea de que el país que ha proporcionado protección a Europa durante décadas pueda dar un paso atrás es motivo de preocupación. Sin embargo, el exministro se mostró optimista, sugiriendo que es poco probable que Estados Unidos abandone su papel de liderazgo en la defensa global, ya que esto iría en contra de sus propios intereses.
En resumen, la conferencia de Eduardo Serra en Las Palmas de Gran Canaria subraya la importancia de Canarias en el contexto geopolítico actual. La región no solo debe ser vista como un punto turístico, sino como un actor clave en la política exterior de España. La atención del Gobierno central hacia las islas es crucial, especialmente en lo que respecta a las relaciones con Marruecos y la defensa nacional. En un mundo cada vez más polarizado, la estabilidad y la cooperación internacional son más necesarias que nunca.