La comunidad canaria se encuentra de luto tras el fallecimiento del expresidente Manuel Hermoso Rojas, quien dejó una huella imborrable en la política y la sociedad de las Islas. A través de un comunicado oficial, el Gobierno de Canarias ha declarado cuatro días de luto, desde el 17 hasta el 20 de junio, en honor a su memoria. Durante este periodo, las banderas de todos los centros públicos de la comunidad ondearán a media asta, simbolizando el respeto y la tristeza por la pérdida de un líder que dedicó su vida al servicio público.
Manuel Hermoso, nacido el 24 de julio de 1935 en San Cristóbal de La Laguna, fue una figura clave en la historia reciente de Canarias. Su carrera política comenzó en la década de 1970, cuando se convirtió en alcalde de Santa Cruz de Tenerife, cargo que ocupó desde 1979 hasta 1991. Durante su mandato, Hermoso transformó la ciudad, implementando políticas que modernizaron la infraestructura y mejoraron la calidad de vida de sus habitantes. Su legado como alcalde es recordado por muchos, y su influencia se siente aún en la actualidad.
En 1991, Hermoso fue nombrado vicepresidente del Gobierno de Canarias, y posteriormente asumió la presidencia del Gobierno entre 1993 y 1999. Su gestión se caracterizó por un enfoque en el desarrollo económico y social de las islas, así como por la promoción de la identidad canaria. A lo largo de su carrera, también se desempeñó como diputado en el Congreso y en el Parlamento de Canarias, donde defendió los intereses de su comunidad con pasión y dedicación.
La noticia de su fallecimiento ha conmovido a la sociedad canaria, y diversas personalidades del ámbito político y social han expresado sus condolencias. El actual presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha suspendido su agenda para asistir a la llegada del féretro a la sede de Presidencia del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife. Clavijo ha manifestado su pesar por la pérdida de Hermoso y ha destacado su contribución al desarrollo de las islas.
La capilla ardiente en honor a Manuel Hermoso se instalará en la sala Adán Martín de la sede de Presidencia del Gobierno, donde amigos, familiares y ciudadanos podrán rendir homenaje a su figura. Este acto es un reflejo del respeto y la admiración que muchos sienten por un hombre que dedicó su vida a la política y al bienestar de su comunidad.
Hermoso no solo es recordado por su carrera política, sino también por su compromiso con la democracia y la justicia social. A lo largo de su vida, luchó por los derechos de los ciudadanos canarios y trabajó incansablemente para mejorar las condiciones de vida en las islas. Su legado perdurará en la memoria colectiva de la comunidad, y su influencia se seguirá sintiendo en las futuras generaciones de líderes canarios.
La historia de Manuel Hermoso es un testimonio de la importancia del servicio público y del impacto que un líder puede tener en su comunidad. Su vida y obra son un ejemplo de dedicación y compromiso, y su fallecimiento deja un vacío en la política canaria que será difícil de llenar. En momentos como este, es fundamental recordar su legado y continuar trabajando por los valores que él defendió a lo largo de su vida.
En el contexto de su muerte, es importante también recordar que el Gobierno de Canarias ha declarado luto oficial en otras ocasiones, como tras el fallecimiento de otros expresidentes, como Adán Martín, Jerónimo Saavedra y Lorenzo Olarte. Estas declaraciones de luto son un reconocimiento a la importancia de estos líderes en la historia de las islas y un momento para reflexionar sobre su legado.
La comunidad canaria se une en este momento de dolor, recordando a Manuel Hermoso no solo como un político, sino como un hombre que dedicó su vida a mejorar la sociedad en la que vivió. Su memoria vivirá en el corazón de aquellos que lo conocieron y en la historia de Canarias, un lugar que él ayudó a transformar y modernizar. En este periodo de luto, se invita a todos los canarios a rendir homenaje a su figura y a reflexionar sobre el impacto que cada uno puede tener en su comunidad, siguiendo el ejemplo de un líder que nunca dejó de luchar por su gente.