Las mujeres migrantes de Mali, Guinea, Gambia, Senegal y Camerún han tenido la oportunidad de explorar su historia y cultura en un evento único en el Museo Canario. Esta visita, organizada por la asociación Culturas Unidas, busca fomentar la interculturalidad y la conexión entre las culturas de los migrantes y la historia canaria. A través de un recorrido guiado, las participantes se sumergieron en el pasado del archipiélago, descubriendo similitudes sorprendentes entre sus tradiciones y las de los canarios.
**Un Encuentro con la Historia**
El recorrido comenzó con la llegada de las diez mujeres al Museo Canario, donde fueron recibidas por Ousmar Gassama, un intérprete que facilitó la comunicación entre las participantes y el historiador Miguel Santana. Desde el primer momento, las mujeres se mostraron interesadas en conocer más sobre los primeros pobladores de Gran Canaria. A través de una recreación digital, pudieron observar cómo vivían los aborígenes, lo que les permitió establecer un vínculo emocional con la historia del lugar.
Durante la visita, se destacó la importancia de las herramientas y materiales utilizados por los antiguos canarios. Por ejemplo, las mujeres se sorprendieron al descubrir que las piedras que se usaban en Canarias para hacer cuchillos y herramientas eran similares a las que empleaban en sus países de origen para encender fuego. Este tipo de conexiones culturales no solo enriqueció su experiencia, sino que también les permitió reflexionar sobre sus propias tradiciones y costumbres.
**La Interacción Cultural**
Uno de los momentos más destacados de la visita fue cuando las mujeres aprendieron sobre las casas cueva, que los aborígenes utilizaban no solo como vivienda, sino también para conservar alimentos. Este aspecto de la vida cotidiana resonó con las participantes, ya que muchas de ellas compartieron que en sus países también se utilizan métodos tradicionales para la conservación de alimentos. La guía del museo les preguntó si conocían el molino de gofio, y todas asintieron, evidenciando la conexión entre sus culturas.
A medida que avanzaba la visita, la curiosidad de las mujeres crecía. Preguntas sobre las pinturas rupestres y los ídolos canarios surgieron, lo que llevó a un diálogo enriquecedor sobre el significado de estos elementos en la historia de Gran Canaria. Las esplendorosas pintaderas canarias y el ídolo de Tara, símbolo de fertilidad, capturaron su atención, y muchas no dudaron en tomar fotografías para recordar la experiencia.
El momento más conmovedor llegó cuando las mujeres se encontraron con las momias de los primeros habitantes de Gran Canaria. La exposición de calaveras y la explicación de las prácticas funerarias de los aborígenes generaron asombro y reflexión entre las participantes. Una de ellas, al ver una momia de un bebé, exclamó «Petite», lo que reflejó la conexión emocional que se estaba formando entre su historia y la de los canarios.
**Fomentando la Interculturalidad**
La visita al Museo Canario no solo fue una oportunidad para aprender sobre la historia del archipiélago, sino que también sirvió como un puente para fomentar la interculturalidad. Pepe López, voluntario de la asociación Culturas Unidas, destacó la importancia de estas actividades para ayudar a los migrantes a identificarse con su nuevo hogar. «Con esta visita hemos intentado que se identifiquen con el archipiélago», comentó López, subrayando el objetivo de acabar con la discriminación que enfrentan muchos migrantes en las islas.
La asociación Culturas Unidas ha llevado a cabo varias visitas guiadas en el pasado, y espera continuar con esta iniciativa para fortalecer los lazos entre las comunidades migrantes y la sociedad canaria. La experiencia vivida por estas mujeres no solo les permitió conocer más sobre su historia, sino que también les brindó un espacio para compartir sus propias vivencias y tradiciones, creando un ambiente de respeto y entendimiento mutuo.
En resumen, la visita al Museo Canario fue un evento significativo que no solo enriqueció la comprensión de la historia canaria entre las mujeres migrantes, sino que también promovió un diálogo intercultural que es esencial en la sociedad actual. A través de estas iniciativas, se busca construir un futuro donde las diferencias culturales sean celebradas y donde todos puedan encontrar un sentido de pertenencia.