La localidad de Potes, en Cantabria, se convirtió en el escenario ideal para la celebración de la Copa de España de escalada, donde tres jóvenes talentos se alzaron con los títulos en sus respectivas categorías. Alejandro Rivas, Julia Benach y Hugo Martín fueron los protagonistas de un evento que no solo destacó por la competencia, sino también por el ambiente de camaradería y el amor por este deporte que sigue creciendo en popularidad.
### Alejandro Rivas: El Rey de la Velocidad
Alejandro Rivas, un madrileño de 23 años, se llevó el primer puesto en la categoría de velocidad, logrando un tiempo impresionante de cinco segundos y 91 centésimas. Este triunfo en Potes marca un hito en su carrera, ya que es su primera victoria en la Copa de España. Rivas compartió su experiencia, revelando que este año ha sido complicado para él, tanto física como mentalmente. «He tenido que lidiar con muchos pensamientos negativos, pero estoy aprendiendo a controlarlos para el próximo año», comentó.
Desde muy joven, Rivas se sintió atraído por la escalada, comenzando a los cuatro años y especializándose en velocidad a los 18. Su dedicación y esfuerzo se reflejan en su evolución como escalador. «No se trata de conseguir velocidad de la noche a la mañana. Comencé con tiempos de 10 segundos, luego bajé a nueve y ocho, y ahora estoy en cinco. Mi objetivo es llegar a un tiempo de cuatro segundos o menos el próximo año», afirmó con determinación.
La prueba de velocidad en Potes fue un desafío que Rivas supo superar, y su alegría al ganar fue evidente. «Estoy contentísimo. Potes es un lugar increíble, y este triunfo es un gran recuerdo para mí», añadió, destacando la belleza del pueblo y su deseo de volver.
### Julia Benach y Hugo Martín: Dominio en la Escalada de Bloque
Por otro lado, Julia Benach, una prometedora escaladora de 17 años de Barcelona, se destacó en la categoría de bloque, logrando un impresionante «tres de tres» en las pruebas de la Copa de España. Benach se mostró satisfecha con su actuación, a pesar de los nervios que sintió durante la final. «En las clasificatorias me vi bien, tranquila y gestionando la presión. Conseguí hacer los cinco bloques, aunque en la final me costó un poco más», explicó.
La joven escaladora también aprovechó la oportunidad para elogiar la belleza de Potes. «Es un sitio precioso. Hacía un poco de frío, pero el lugar es espectacular», comentó entre risas. Benach también subrayó el crecimiento del deporte de escalada en España, mencionando que, aunque ha sido un camino difícil, la comunidad de escaladores se apoya mutuamente. «Calentamos juntos, visualizamos juntos… competimos individualmente, pero hay un gran compañerismo», añadió.
Hugo Martín, otro madrileño de 20 años, también brilló en la competición de bloque. Al igual que sus compañeros, Martín expresó su satisfacción por el evento y su victoria. «La final estuvo muy reñida, pero logré resolver el último bloque, lo que me dio la victoria», comentó. Al igual que Rivas y Benach, Martín se sintió atraído por la belleza de Potes, aunque admitió que no tuvo mucho tiempo para hacer turismo debido a la preparación para la competición.
### Un Evento Organizado con Éxito
La Copa de España de escalada en Potes fue organizada por varias entidades, incluyendo la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada, y contó con el apoyo de instituciones locales como el Ayuntamiento de Potes y la Fundación Camino Lebaniego. El evento también recibió el patrocinio de varias empresas, lo que demuestra el creciente interés y apoyo hacia la escalada como deporte en España.
La participación de jóvenes talentos como Rivas, Benach y Martín no solo resalta el potencial de la escalada en el país, sino que también inspira a futuras generaciones a involucrarse en este deporte. La escalada, que combina fuerza, técnica y estrategia, está ganando popularidad y reconocimiento, y eventos como este son fundamentales para su desarrollo.
La comunidad de escaladores en España sigue creciendo, y con ello, la esperanza de que más jóvenes se animen a practicar este deporte. La Copa de España en Potes no solo fue una competición, sino una celebración del espíritu de la escalada, donde la pasión y la dedicación de los atletas brillaron en cada bloque y cada carrera. Con el apoyo adecuado y el compromiso de los deportistas, el futuro de la escalada en España parece prometedor.
