Un trágico accidente ha conmocionado a la comunidad de Valle Gran Rey, en la isla de La Gomera, donde dos personas han perdido la vida tras ser atropelladas por un vehículo. El incidente ocurrió en la vía GM-1, cerca de Arure, alrededor de las 19:00 horas del pasado domingo. Según informes del Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 1-1-2 del Gobierno de Canarias, el conductor del vehículo perdió el control, impactando contra la pared de una vivienda y atropellando a dos personas que se encontraban en el exterior.
El impacto fue devastador, causando no solo la muerte de una mujer y un hombre, sino también daños significativos a la propiedad afectada, con parte de la fachada de la casa derrumbándose. Las víctimas fatales estaban en el lugar del accidente cuando el vehículo descontrolado se abalanzó sobre ellos. Además, otros dos ocupantes del coche resultaron heridos: una mujer que viajaba como copiloto, quien sufrió lesiones graves y fue trasladada en un helicóptero medicalizado al Hospital Universitario Ntra. Sra. de Candelaria en Tenerife, y el conductor, que presenta un traumatismo en la cadera de carácter moderado y fue llevado al Hospital Ntra. Sra. de Guadalupe.
El despliegue de emergencias en la escena fue amplio, involucrando a los bomberos de Valle Gran Rey, la Guardia Civil, y equipos del Servicio de Urgencias Canario (SUC), así como personal de Atención Primaria y Protección Civil de La Gomera. La situación fue caótica, con varias personas atendidas por crisis de ansiedad debido a la gravedad del accidente.
La comunidad local se encuentra en estado de shock tras este trágico suceso, que ha resaltado la necesidad de una mayor atención a la seguridad vial en la zona. Las autoridades han comenzado a investigar las circunstancias que llevaron a este accidente, buscando respuestas sobre cómo un vehículo pudo perder el control de manera tan repentina.
La vía GM-1 es una carretera importante en La Gomera, y los residentes han expresado su preocupación por la seguridad en esta ruta, especialmente en áreas donde hay un alto tránsito peatonal. Este accidente ha reavivado el debate sobre la necesidad de implementar medidas de seguridad adicionales, como señales de advertencia, límites de velocidad más estrictos y controles de tráfico más rigurosos.
La tragedia ha dejado una profunda huella en la comunidad de Valle Gran Rey, donde muchos se han reunido para rendir homenaje a las víctimas. Se han organizado vigilias y actos en memoria de aquellos que perdieron la vida, mostrando la solidaridad y el apoyo de los vecinos en estos momentos difíciles. Las redes sociales también han sido un canal para que la comunidad exprese su dolor y comparta mensajes de condolencias.
Este accidente no solo ha afectado a las familias de las víctimas, sino que también ha impactado a los servicios de emergencia que respondieron a la escena. Los profesionales de la salud y los bomberos han enfrentado situaciones desgarradoras, y se espera que se les ofrezca apoyo psicológico para ayudarles a lidiar con el trauma de lo ocurrido.
La seguridad vial es un tema que requiere atención constante, y este trágico evento subraya la importancia de la educación y la concienciación sobre las normas de tráfico. Las autoridades locales están trabajando para mejorar la seguridad en las carreteras, pero también es fundamental que los conductores y peatones sean responsables y estén atentos en todo momento.
Mientras tanto, la comunidad de Valle Gran Rey se une en un esfuerzo por sanar y recordar a aquellos que han perdido la vida en este trágico accidente. La esperanza es que, a través de la reflexión y la acción, se puedan evitar futuros incidentes y garantizar que todos los que transitan por las carreteras de La Gomera puedan hacerlo de manera segura.