La carretera GC-15, que conecta Las Palmas de Gran Canaria con Santa Brígida, ha sido objeto de atención reciente debido a la instalación de un nuevo radar fijo. Este dispositivo, que comenzó a operar el 28 de octubre de 2025, se sitúa en un punto estratégico justo después del cruce de La Atalaya, en dirección a Santa Brígida. La Dirección General de Tráfico (DGT) ha implementado esta medida con el objetivo de mejorar la seguridad vial en una de las rutas más transitadas de la isla.
La GC-15 es conocida por sus curvas y tramos sinuosos, donde los excesos de velocidad son comunes. Este nuevo radar está diseñado para vigilar ambos sentidos de la carretera, lo que significa que no solo los conductores que se dirigen hacia Santa Brígida estarán bajo su supervisión, sino también aquellos que regresan a Las Palmas. La activación del radar se ha realizado sin previo aviso, lo que ha sorprendido a muchos conductores habituales que utilizan esta vía a diario.
### Un Enfoque en la Seguridad Vial
La instalación de este radar es parte de un plan más amplio de la DGT para reforzar la seguridad en carreteras secundarias y de acceso a núcleos urbanos, especialmente en islas como Gran Canaria. La DGT ha enfatizado la importancia de reducir los accidentes de tráfico, que a menudo son causados por el exceso de velocidad. Este nuevo control busca no solo sancionar a los infractores, sino también concienciar a los conductores sobre la necesidad de respetar los límites de velocidad, incluso en trayectos que parecen rutinarios.
La carretera GC-15 atraviesa varias áreas urbanas, incluyendo barrios y zonas escolares, lo que la convierte en un lugar donde la seguridad vial es especialmente crítica. La DGT ha instado a los conductores a adaptar su estilo de conducción a las condiciones del entorno, recordando que la velocidad no solo pone en riesgo a los conductores, sino también a peatones y ciclistas que comparten la vía.
La implementación de este radar es un paso significativo hacia la mejora de la seguridad en las carreteras de Gran Canaria. Las autoridades locales han manifestado su apoyo a esta medida, destacando que es fundamental para garantizar la seguridad de todos los usuarios de la vía. Además, se espera que la presencia de este radar disuada a los conductores de exceder los límites de velocidad, promoviendo así una cultura de conducción más responsable.
### Reacciones de los Conductores
La reacción de los conductores ante la instalación del nuevo radar ha sido variada. Algunos han expresado su preocupación por la falta de aviso previo, argumentando que la sorpresa puede llevar a una mayor ansiedad al volante. Sin embargo, otros han acogido la medida como una oportunidad para mejorar la seguridad en la carretera. La DGT ha señalado que la educación vial es un componente clave en la reducción de accidentes, y que la instalación de radares es solo una parte de un enfoque más amplio que incluye campañas de concienciación y formación.
Los conductores que utilizan la GC-15 con frecuencia han comenzado a ajustar sus hábitos de conducción desde la activación del radar. Muchos han comentado que están más atentos a los límites de velocidad y a las condiciones de la carretera, lo que podría resultar en una disminución de la velocidad promedio en este tramo. La DGT espera que, con el tiempo, la presencia del radar contribuya a una reducción significativa en el número de accidentes y sanciones por exceso de velocidad en la zona.
La DGT también ha indicado que se realizarán evaluaciones periódicas para medir la efectividad del radar y su impacto en la seguridad vial. Esto incluye el análisis de datos sobre accidentes y multas en la GC-15, así como encuestas a los conductores sobre su percepción de la seguridad en la carretera. La información recopilada ayudará a las autoridades a ajustar sus estrategias y a implementar medidas adicionales si es necesario.
En resumen, la instalación del nuevo radar en la GC-15 representa un esfuerzo concertado para mejorar la seguridad vial en Gran Canaria. Con un enfoque en la educación y la concienciación, así como en la vigilancia activa, las autoridades esperan que esta medida contribuya a un entorno de conducción más seguro para todos. La comunidad de conductores también tiene un papel importante que desempeñar en este esfuerzo, al adoptar prácticas de conducción responsables y respetar los límites de velocidad establecidos.
