El hundimiento del pesquero Villa de Pitanxo, que tuvo lugar el 15 de febrero de 2022, ha dejado una profunda huella en la comunidad y en las familias de las 21 víctimas, entre ellas el biólogo canario Manuel Navarro. Recientemente, un informe de la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (CIAIM) ha reavivado el interés en este trágico suceso, al introducir nuevos elementos que podrían ampliar las responsabilidades de los involucrados. Las familias de las víctimas están considerando solicitar nuevas diligencias judiciales, lo que podría llevar a un nuevo capítulo en la búsqueda de justicia.
La investigación inicial había señalado a la negligencia del capitán Juan Padín como uno de los factores principales del hundimiento. Sin embargo, el nuevo informe de la CIAIM, que consta de 173 páginas, ha revelado detalles que no se conocían en la primera fase de la investigación. Según el abogado de las familias, Manuel Lampón, el informe sugiere que el pesquero estaba sobrecargado y que el capitán no realizó una evaluación adecuada de la situación crítica en la que se encontraba el barco. Esto incluye la instalación de tanques de combustible adicionales que comprometieron la estabilidad del buque, un hecho que no había sido considerado anteriormente.
### Responsabilidades Aumentadas
El informe de la CIAIM no solo apunta a la responsabilidad del capitán, sino que también sugiere que la empresa armadora Nores podría tener un papel significativo en las negligencias que llevaron al hundimiento. Durante una rueda de prensa, María José de Pazo, portavoz de las familias, enfatizó que el documento es contundente en su señalamiento de responsabilidades. «El informe arroja nuevamente responsabilidad del hundimiento y del fallecimiento de 21 personas en el Villa de Pitanxo», afirmó De Pazo, añadiendo que el contenido del informe es «espeluznante» y que se ha puesto de manifiesto la falta de mantenimiento de los trajes de supervivencia, que no se revisaban desde hacía 20 años.
La falta de simulacros de emergencia y el mal estado del equipo de supervivencia también han sido criticados en el informe. Los técnicos de la CIAIM han señalado que el barco podría haber resistido las condiciones meteorológicas adversas si se hubiera mantenido la estanqueidad del casco. Sin embargo, el exceso de carga y las modificaciones no autorizadas comprometieron la estabilidad del barco, lo que resultó en una inundación progresiva que llevó al naufragio.
### La Lucha por la Verdad
Las familias de las víctimas han expresado su deseo de que se haga justicia y de que se esclarezcan todos los detalles del hundimiento. El abogado Manuel Lampón ha indicado que están a la espera de que la CIAIM entregue formalmente el informe completo, que incluirá toda la documentación de soporte necesaria para continuar con el proceso judicial. Una vez que tengan acceso a esta información, las familias decidirán si es necesario solicitar más diligencias de investigación.
La portavoz de las familias, María José de Pazo, ha manifestado su confianza en que la verdad saldrá a la luz. «La verdad tiene un camino solo. Haya dos, tres o mil informes, la verdad es una y siempre van a decir esto», aseguró. Este sentimiento de determinación es palpable entre las familias, que buscan no solo justicia para sus seres queridos, sino también cambios en las regulaciones de seguridad marítima para prevenir futuros desastres.
El informe de la CIAIM ha sido descrito como un trabajo exhaustivo que no solo se limita a Galicia o España, sino que tiene implicaciones más amplias. Las familias esperan que este documento sirva como un catalizador para mejorar las condiciones de seguridad en la industria pesquera y para garantizar que tragedias como la del Villa de Pitanxo no se repitan en el futuro. La lucha por la verdad y la justicia continúa, y las familias están decididas a seguir adelante hasta que se reconozcan todas las responsabilidades y se implementen las reformas necesarias.
