La jornada del 3 de junio de 2025 marcó un hito en la historia religiosa de Vecindario, un municipio de Santa Lucía de Tirajana en Gran Canaria. Desde las primeras horas del día, cientos de fieles se congregaron en el Cruce de Sardina para recibir a la Virgen del Pino, patrona de la Diócesis de Canarias. Este evento no solo fue una manifestación de fe, sino también un momento de unión y celebración para la comunidad local y los visitantes que llegaron de diferentes partes de la isla y más allá.
La procesión comenzó a las 6:30 de la mañana, cuando la imagen de la Virgen fue trasladada desde su punto de origen hasta la Iglesia de San Rafael Arcángel. Este acto, que se llevó a cabo por primera vez en la historia de Vecindario, transformó una mañana ordinaria en un evento solemne y multitudinario. Los asistentes, con gran devoción, se unieron a la procesión, creando un ambiente de fervor religioso que resonó en cada rincón del municipio.
### Un Recorrido de Fe y Tradición
La llegada de la Virgen del Pino a Vecindario es parte de la 52ª edición de la Bajada, un recorrido extraordinario que comenzó el 31 de mayo. En su primer día, más de 100,000 peregrinos acompañaron a la imagen en su trayecto desde la Basílica de Teror hasta Las Palmas de Gran Canaria. Este evento ha sido un punto de encuentro para los canarios, quienes han demostrado una respuesta masiva y ejemplar, según fuentes de la Diócesis.
Durante el fin de semana previo a la llegada a Vecindario, la imagen de la Virgen permaneció en la Catedral de Canarias, donde se llevaron a cabo diversos actos litúrgicos. Entre ellos, se celebraron el Jubileo de la Infancia y el Jubileo de los Músicos, así como actividades dirigidas a personas mayores y enfermas. La Diócesis ha expresado su agradecimiento por la cálida acogida que ha recibido en cada parada del recorrido, invitando a todos a seguir participando con devoción en los eventos programados.
La jornada en Vecindario no se limitó a la procesión matutina. Tras la firma del acta de recepción oficial, se celebró una Eucaristía en el templo, y por la tarde, la Virgen volvió a salir en procesión a las 19:00 horas, seguida de una misa en la plaza de San Rafael a las 20:00 horas. Este ciclo de actividades culminó con un acto institucional que reunió a autoridades civiles y religiosas, subrayando la importancia del evento tanto a nivel local como regional.
### La Próxima Parada: Telde
El recorrido de la Virgen del Pino no se detiene en Vecindario. El próximo destino será Telde, donde se espera que la imagen sea recibida con la misma devoción y fervor. El 5 de junio, una procesión partirá desde el parque Franchy Roca hasta la parroquia de San Gregorio, donde se llevará a cabo la firma del acta de recepción y una Eucaristía. La jornada en Telde también incluirá una misa a las 18:00 horas y un emotivo Vía Lucis a las 19:00 horas, que recorrerá el trayecto hasta la Basílica de San Juan Bautista, acompañado por las imágenes del Santo Cristo de Telde y de la Virgen del Pino.
Este peregrinaje no solo es una celebración de la fe, sino también un reflejo de la cultura y tradiciones canarias. La participación activa de los colegios de la zona, como El Tamaran y Barranco de Balos, que se unieron para cantar a la Virgen, es un ejemplo del compromiso de la comunidad en mantener vivas estas tradiciones.
La Virgen del Pino, con su llegada a Vecindario y su próximo paso hacia Telde, continúa siendo un símbolo de unidad y esperanza para los canarios. Este evento no solo fortalece la fe de los creyentes, sino que también promueve la cohesión social y el sentido de pertenencia entre los habitantes de la isla. La devoción hacia la Virgen del Pino trasciende generaciones, convirtiendo cada peregrinaje en una experiencia inolvidable que une a la comunidad en torno a sus creencias y tradiciones.
La Bajada de la Virgen del Pino es, sin duda, un evento que resuena en el corazón de cada canario, y su impacto se siente no solo en el ámbito religioso, sino también en el cultural y social. A medida que avanza el recorrido, la expectativa y la emoción crecen, prometiendo más momentos memorables en cada parada del camino.