En el contexto actual de la economía canaria, la inversión pública se presenta como un elemento crucial para atraer sectores de alto valor añadido. José Luis Rivero Ceballos, catedrático de Economía Aplicada en la Universidad de La Laguna, ha expuesto su visión sobre la situación económica de las islas y las decisiones que deben evitarse para mantener un crecimiento sostenible. En su reciente intervención en el Parlamento regional, Rivero destacó la importancia de no reducir la imposición indirecta, específicamente el IGIC, y de mantener un diferencial fiscal que favorezca a Canarias frente a la península.
### La Fiscalidad y su Impacto en la Economía Canaria
Rivero argumenta que la reducción del IGIC podría tener consecuencias negativas para la financiación de los presupuestos públicos, que son esenciales para sectores como la sanidad, la educación y la infraestructura. En su opinión, es fundamental que Canarias mantenga su diferencial de 9 puntos en la imposición indirecta, ya que esto es clave para atraer inversiones y fomentar el desarrollo económico.
La política fiscal en Canarias debe ser diseñada de manera que no solo se busque la reducción de impuestos, sino que también se garantice la sostenibilidad de los servicios públicos. Rivero enfatiza que la financiación adecuada de áreas críticas como la Formación Profesional dual y las infraestructuras de calidad son esenciales para atraer sectores relacionados con la ciencia y la tecnología. Esto no solo beneficiaría a la economía local, sino que también podría posicionar a Canarias como un hub de innovación en el Atlántico.
Además, el catedrático advierte sobre los efectos de la política arancelaria de Estados Unidos y el aumento de la inflación, que pueden impactar negativamente en la economía de las islas. La dependencia de las importaciones y el comercio internacional hace que Canarias sea vulnerable a cambios en el panorama global. Por lo tanto, es crucial que las autoridades canarias implementen estrategias que mitiguen estos riesgos y fortalezcan la economía local.
### La Diversificación como Estrategia de Crecimiento
Otro punto clave en la intervención de Rivero es la necesidad de diversificación económica. La economía canaria, tradicionalmente dependiente del turismo, debe buscar nuevas áreas de crecimiento. Esto implica incentivar la creación de proyectos que cuenten con infraestructuras bien dotadas y que sean financiados por el sector público. La zona franca, por ejemplo, se encuentra infrautilizada y podría ser un motor de diversificación si se le otorgan los incentivos adecuados.
La diversificación no solo se refiere a la creación de nuevos sectores económicos, sino también a la mejora de los existentes. La inversión en ciencia y tecnología es fundamental para que Canarias pueda competir en un mundo cada vez más globalizado. Rivero señala que es necesario fomentar la investigación y el desarrollo, así como atraer empresas que se dediquen a la innovación. Esto no solo generaría empleo de calidad, sino que también contribuiría a la estabilidad económica a largo plazo.
Además, la inversión pública en infraestructura es esencial para facilitar esta diversificación. Las islas necesitan contar con instalaciones adecuadas que permitan el desarrollo de nuevos proyectos y la atracción de empresas. Esto incluye desde la mejora de las conexiones de transporte hasta la creación de espacios de trabajo colaborativo que fomenten la innovación.
Rivero también menciona la importancia de la formación y la capacitación de la mano de obra local. La educación debe adaptarse a las necesidades del mercado laboral, y la Formación Profesional dual es una herramienta clave para ello. Al invertir en la educación y en la formación de los trabajadores, Canarias puede asegurarse de que su población esté preparada para los desafíos del futuro.
En resumen, la inversión pública es un pilar fundamental para el desarrollo económico de Canarias. La fiscalidad adecuada, la diversificación de la economía y la mejora de la infraestructura son elementos que deben ser priorizados para garantizar un crecimiento sostenible y resiliente. La visión de José Luis Rivero Ceballos ofrece un marco claro sobre cómo las decisiones políticas pueden influir en el futuro económico de las islas, y subraya la necesidad de un enfoque estratégico que contemple tanto la inversión como la formación y la innovación.