Las Palmas de Gran Canaria ha sido el epicentro de una significativa inyección económica gracias al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) del Gobierno de España. Este programa, diseñado para revitalizar la economía tras la crisis provocada por la pandemia de Covid-19, ha canalizado un total de 2.660 millones de euros hacia las Islas Canarias. Esta cifra no solo representa una oportunidad de crecimiento, sino que también refleja un compromiso con la sostenibilidad y la mejora de la calidad de vida de sus habitantes.
### Impacto Económico y Social del PRTR en Canarias
Desde su implementación, el PRTR ha beneficiado a más de 36.100 personas en el Archipiélago, lo que demuestra su impacto directo en el empleo y la economía local. De los 2.660 millones de euros asignados, 836 millones han sido gestionados a través de convocatorias y licitaciones de la Administración General del Estado, mientras que 1.824 millones han sido distribuidos a la Comunidad Autónoma mediante conferencias sectoriales. Este enfoque descentralizado permite que las comunidades autónomas actúen como el principal brazo ejecutor de los fondos europeos, facilitando una respuesta más ágil y adaptada a las necesidades locales.
Uno de los pilares fundamentales del PRTR en Canarias es la transición ecológica. En este sentido, se han destinado más de 300 millones de euros a estrategias de energía sostenible, de los cuales ya se ha ejecutado un 42%. Esta inversión no solo busca fomentar el uso de energías limpias, sino que también se alinea con los objetivos globales de sostenibilidad y reducción de emisiones. Entre los proyectos destacados se encuentran iniciativas en geotermia profunda, energía renovable marina y la modernización de infraestructuras eléctricas, que son cruciales para el desarrollo de un futuro más verde.
El delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, ha enfatizado la importancia de estas inversiones, señalando que las islas continúan beneficiándose de un enfoque hacia un futuro inclusivo y sostenible. Además, ha destacado otras áreas de inversión significativas, como los 44,5 millones de euros destinados a movilidad sostenible, 106 millones para la economía social y 79 millones para la modernización de regadíos. Estas iniciativas no solo contribuyen al crecimiento económico, sino que también mejoran la calidad de vida de los ciudadanos canarios.
### Proyecciones Futuras y Desarrollo Sostenible
Las proyecciones para el futuro son igualmente alentadoras. Según las previsiones del Ministerio de Hacienda, Canarias recibirá en 2026 las mayores entregas a cuenta de su historia, alcanzando los 7.069 millones de euros, lo que representa un incremento del 7,2% respecto a 2025. Esta tendencia ascendente se espera que continúe, con un total de 8.138 millones al incluir la liquidación de 2024. Este flujo constante de recursos es vital para mantener el impulso económico y social en la región.
El impacto de estas políticas se refleja en la mejora de la situación laboral en las islas. A finales de junio, se registraron 938.227 personas ocupadas, lo que representa un aumento de 147.000 empleos desde 2018. Además, cerca de 120.000 canarios han recibido el Ingreso Mínimo Vital desde su implementación en 2020, lo que ha proporcionado un soporte crucial a las familias en situación de vulnerabilidad. También se han beneficiado 46.716 estudiantes de becas y 46.000 personas del bono social eléctrico, lo que demuestra el alcance de las políticas sociales implementadas.
La combinación de inversiones en infraestructura, sostenibilidad y apoyo social está configurando un panorama prometedor para Canarias. La capacidad de la región para adaptarse y aprovechar estos recursos será fundamental para enfrentar los desafíos futuros y garantizar un desarrollo equilibrado y sostenible. En un contexto global donde la sostenibilidad se ha convertido en una prioridad, el enfoque de Canarias hacia la transición ecológica y la inclusión social puede servir como un modelo a seguir para otras comunidades.
La colaboración entre el Gobierno central y las autoridades locales es esencial para maximizar el impacto de estas inversiones. A medida que se avanza en la ejecución de los proyectos, es crucial mantener un diálogo abierto y constructivo que permita ajustar las estrategias según las necesidades cambiantes de la población. La participación activa de la ciudadanía en este proceso también es fundamental para asegurar que las políticas implementadas respondan a las expectativas y necesidades de los canarios.
En resumen, la inyección de 2.660 millones de euros del Plan de Recuperación en Canarias no solo representa una oportunidad económica, sino también un compromiso hacia un futuro más sostenible y equitativo. Las inversiones en energía sostenible, movilidad, economía social y apoyo a las familias son pasos significativos hacia la construcción de una sociedad más resiliente y preparada para los retos del mañana.