El panorama laboral en España durante el mes de julio de 2025 presenta un cuadro mixto, donde la creación de empleo continúa, pero con señales de desaceleración. A pesar de que el país ha alcanzado un récord histórico de 21,9 millones de afiliados a la Seguridad Social, el crecimiento en la afiliación ha sido mínimo, con solo 4.408 nuevos cotizantes, lo que representa una caída del 0,06% en comparación con el mes anterior. Este leve aumento en el número de afiliados contrasta con la tendencia positiva observada en años anteriores, donde julio solía ser un mes de gran actividad laboral, especialmente en el sector turístico.
**Desempleo y Sectores Afectados**
El desempleo en España ha disminuido en 1.357 personas, situándose en 2.404.606 parados, el nivel más bajo en 18 años. Sin embargo, este descenso es menos significativo que en años anteriores, lo que genera preocupación entre los analistas. El sector servicios, que tradicionalmente se beneficia del aumento de la actividad económica durante el verano, ha experimentado un incremento de 2.018 desempleados. Este aumento se debe principalmente a la inestabilidad estacional en la hostelería y el comercio, que son conocidos por su alta temporalidad.
Por otro lado, el sector agrario ha visto una ligera reducción en el número de desempleados, con 614 menos que en junio, mientras que la construcción y la industria han registrado aumentos en el desempleo, con 138 y 416 parados más, respectivamente. Estos datos sugieren que, aunque la economía sigue creando empleo, la calidad y estabilidad de estos puestos son cuestionables, especialmente en sectores vulnerables a la estacionalidad.
**Contratación y Calidad del Empleo**
En términos de contratación, el número total de contratos ha aumentado un 6% en comparación con junio, aunque la mayoría de estos son temporales. Los contratos indefinidos han crecido un 3,8%, lo que indica que la tendencia hacia la temporalidad sigue siendo un desafío para el mercado laboral español. La proporción de contratos fijos ha disminuido, situándose en un 38% del total de nuevas contrataciones, lo que refleja una preocupación por la calidad del empleo generado.
El desempleo juvenil ha mostrado una tendencia positiva, con una reducción de 2.561 parados menores de 25 años, alcanzando su nivel más bajo en un mes de julio desde que se tienen registros. Esto es un indicativo de que, a pesar de los desafíos, hay oportunidades emergentes para los jóvenes en el mercado laboral. Además, el número de trabajadores autónomos ha superado los 3,4 millones, con un aumento notable en los sectores altamente productivos, lo que sugiere una diversificación en las oportunidades de empleo.
Sin embargo, la reforma laboral implementada en años anteriores no ha logrado frenar la tendencia de despidos estacionales en el sector educativo, que ha perdido casi 124.000 asalariados al inicio de las vacaciones. Este patrón de despidos resalta la necesidad de políticas más efectivas que protejan a los trabajadores en sectores vulnerables.
**Perspectivas Futuras**
A medida que el verano avanza, se espera que el mercado laboral continúe enfrentando desafíos. La creación de empleo, aunque positiva, no es suficiente para contrarrestar las pérdidas en sectores clave. La dependencia de la temporalidad y la estacionalidad en la contratación son factores que deben ser abordados para garantizar un crecimiento sostenible y de calidad en el empleo.
Las proyecciones para el futuro inmediato sugieren que, si bien el número de afiliados puede seguir aumentando, la calidad de estos empleos y la estabilidad laboral seguirán siendo temas críticos. La necesidad de una mayor inversión en formación y desarrollo profesional se vuelve evidente, especialmente para los jóvenes y los trabajadores en sectores en declive.
En resumen, el mercado laboral español en julio de 2025 presenta un panorama de crecimiento moderado, con señales de desaceleración que invitan a la reflexión sobre la calidad del empleo y la necesidad de políticas que promuevan la estabilidad y la inclusión laboral. La atención a las fluctuaciones estacionales y la temporalidad será crucial para asegurar un futuro laboral más sólido y equitativo para todos los españoles.