El reciente ataque unilateral de Israel contra Irán ha desatado una nueva ola de tensiones en el Medio Oriente, generando un debate intenso sobre la legalidad de la acción militar y sus implicaciones en el derecho internacional. Este conflicto no solo afecta a los países involucrados, sino que también tiene el potencial de impactar la economía global y la estabilidad regional, dada la complejidad de las alianzas y las rivalidades en juego.
### La Justificación del Ataque: ¿Legítima Defensa o Agresión Ilegal?
Israel ha argumentado que su ataque es un acto de «defensa preventiva» para evitar que Irán desarrolle armas nucleares, presentando su ofensiva como una medida necesaria para proteger su existencia. Sin embargo, expertos en derecho internacional han cuestionado esta narrativa, señalando que el uso de la fuerza está prohibido salvo en dos circunstancias: cuando hay una autorización del Consejo de Seguridad de la ONU o en caso de legítima defensa ante un ataque real, actual o inminente.
Carmen Márquez, catedrática de Derecho Internacional Público, enfatiza que no ha habido un ataque armado por parte de Irán contra Israel, ni se ha demostrado una amenaza inminente que justifique la acción militar israelí. Según Márquez, el ataque es un «claro acto de agresión» que infringe las normas del orden internacional. Ana Manero, también catedrática en este campo, coincide en que el ataque es ilegal, ya que no responde a un ataque previo y carece de evidencia de una amenaza inminente.
La doctrina de la «defensa preventiva» ha sido ampliamente rechazada por la comunidad internacional, ya que se considera incompatible con el artículo 51 de la Carta de la ONU. Este principio, que fue impulsado por la Estrategia de Seguridad Nacional de Estados Unidos en 2002, ha sido utilizado para justificar intervenciones militares, pero su validez es cuestionada por muchos juristas. Jaume Saura, experto en leyes de la guerra, señala que la defensa preventiva solo puede ser válida en situaciones donde hay una movilización militar real y un ataque inminente, lo que no se aplica en este caso.
### Implicaciones de los Ataques a Objetivos Civiles
Otro aspecto crítico del ataque israelí es la naturaleza de los objetivos seleccionados. Según los informes, Israel ha bombardeado no solo instalaciones militares, sino también objetivos civiles, lo que podría constituir crímenes de guerra. La catedrática Manero destaca que los ataques a zonas densamente pobladas y a infraestructuras civiles, como plantas nucleares y centrales energéticas, son violaciones del derecho internacional humanitario.
La comunidad internacional ha sido históricamente crítica con respecto a ataques a instalaciones nucleares. Por ejemplo, el ataque israelí al reactor nuclear iraquí en 1981 fue condenado por el Consejo de Seguridad de la ONU como una violación de la Carta de Naciones Unidas. Sin embargo, la respuesta actual de líderes occidentales a la agresión israelí ha sido notablemente diferente, lo que plantea preguntas sobre la coherencia y la aplicación del derecho internacional.
El exjefe de la OIEA, Mohamed El Baradei, recordó a los líderes europeos que los ataques selectivos a instalaciones nucleares están prohibidos por el derecho internacional. Esta doble moral en la aplicación de las normas internacionales ha llevado a críticas sobre la falta de acción efectiva contra lo que muchos consideran crímenes de guerra. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, ha defendido el derecho de Israel a actuar en defensa propia, una postura que ha sido cuestionada por expertos que argumentan que solo Irán tiene derecho a la legítima defensa en este contexto.
La situación actual refleja una tendencia preocupante en la política internacional, donde las normas del derecho internacional son interpretadas de manera selectiva, dependiendo de los intereses geopolíticos de los actores involucrados. La falta de una respuesta unificada y coherente ante las violaciones del derecho internacional puede tener consecuencias graves, no solo para la región del Medio Oriente, sino para el orden mundial en su conjunto.
A medida que el conflicto entre Israel e Irán se intensifica, es crucial que la comunidad internacional reevalúe su enfoque hacia la legalidad de las acciones militares y la protección de los derechos humanos. La guerra no solo trae consigo la devastación y el sufrimiento humano, sino que también socava las bases del orden internacional que busca prevenir tales conflictos. La defensa de la legalidad y la justicia en el ámbito internacional es más importante que nunca, y el futuro de la paz en la región podría depender de ello.