La llegada de inmigrantes a las costas canarias ha experimentado una notable disminución en los primeros nueve meses de 2025. Según datos proporcionados por el Gobierno de Canarias, el número de migrantes que han arribado en cayucos o pateras desde Mauritania ha caído un 52%, alcanzando un total de 8.178 personas en comparación con las 16.976 registradas en el mismo periodo del año anterior. Este descenso se produce en un contexto de creciente preocupación por la migración irregular y las condiciones de vida en los países de origen de estos migrantes.
La reunión reciente entre los viceconsejeros del Gabinete del Presidente de Canarias y una delegación europea en Nuakchot, la capital de Mauritania, ha sido un punto focal para discutir las estrategias de control migratorio y la cooperación internacional. Durante este encuentro, se destacó la importancia de estabilizar Mauritania, un país que se ha convertido en un punto clave en la ruta migratoria hacia Europa. La inestabilidad política y los conflictos bélicos en la región del Sahel han llevado a un aumento en el número de personas que buscan escapar de la violencia y la pobreza, lo que a su vez ha intensificado la presión sobre las costas canarias.
### Estrategias de Control y Cooperación Internacional
El Gobierno de Canarias ha enfatizado la necesidad de una colaboración efectiva con la Unión Europea para abordar la crisis migratoria. Mauritania ha sido identificada como un país prioritario debido a su relativa estabilidad en comparación con otros países de la región, como Burkina Faso, Níger y Mali, que enfrentan desafíos significativos relacionados con la seguridad y la gobernanza. La Comisión Europea ha estado trabajando en estrecha colaboración con las autoridades mauritanas para implementar medidas que ayuden a contener el flujo migratorio.
Uno de los enfoques clave de esta colaboración es la creación de centros de tránsito en Mauritania, que están destinados a gestionar el flujo de migrantes y facilitar su retorno a sus países de origen. Estos centros, ubicados en Nouakchot y Nuadibú, serán transferidos a las autoridades locales en octubre, lo que marca un paso importante en la cooperación entre la UE y Mauritania. Sin embargo, esta colaboración viene acompañada de una serie de condiciones que deben cumplirse para garantizar su efectividad y continuidad.
Además, se ha puesto un énfasis considerable en la formación profesional de los migrantes en sus países de origen. El proyecto Tierra Firme, impulsado por el Gobierno de Canarias, ha permitido que más de 500 jóvenes de Senegal, Mauritania y Gambia reciban capacitación en sectores con alta demanda laboral, como la construcción, la agricultura, el turismo y el textil. Esta iniciativa no solo busca reducir la migración irregular, sino también ofrecer alternativas viables a los jóvenes en sus comunidades.
### Impacto de la Migración en Canarias
La disminución en la llegada de migrantes no solo es un alivio para las autoridades canarias, sino que también refleja un cambio en las dinámicas migratorias en la región. La caída del 77% en la llegada de inmigrantes procedentes de Senegal y del 55% de Marruecos indica que las políticas implementadas están comenzando a tener un efecto positivo. Sin embargo, el Gobierno de Canarias advierte que la situación sigue siendo delicada y que es crucial mantener un enfoque proactivo para abordar las causas subyacentes de la migración.
La migración irregular ha sido un tema candente en Canarias, donde la llegada de migrantes ha generado tanto preocupación como solidaridad. Las comunidades locales han mostrado una mezcla de reacciones, desde el apoyo a los migrantes hasta el temor por los recursos limitados y la presión sobre los servicios públicos. La gestión de esta situación requiere un equilibrio delicado entre la seguridad, la humanidad y la cooperación internacional.
A medida que se avanza hacia el final de 2025, el Gobierno de Canarias y la Unión Europea continuarán trabajando juntos para abordar los desafíos que plantea la migración. La situación en Mauritania y otros países de origen seguirá siendo un factor determinante en la evolución de las rutas migratorias y en la vida de miles de personas que buscan una vida mejor. La colaboración internacional, la formación y la creación de oportunidades en los países de origen son pasos fundamentales para abordar esta compleja problemática de manera efectiva.