La gestión de la crisis sanitaria en Canarias ha sido objeto de intensos debates y análisis, especialmente en el contexto de las recientes comparecencias del ministro Ángel Víctor Torres. En una rueda de prensa reciente, se plantearon diez preguntas cruciales que buscan aclarar la situación actual y las decisiones tomadas durante la pandemia. Estas interrogantes no solo reflejan la preocupación de la ciudadanía, sino que también ponen de manifiesto la necesidad de transparencia en la gestión pública.
### El Papel del Comité de Gestión en la Crisis Sanitaria
Una de las preguntas más apremiantes es sobre el papel real del comité de gestión que se formó al inicio de la crisis sanitaria. Desde el comienzo de la pandemia, ha existido incertidumbre sobre las funciones específicas de este comité. Torres se rodeó de consejeros, expertos y otros cargos públicos, pero la falta de claridad sobre las responsabilidades individuales ha generado dudas. ¿Realmente se discutieron las propuestas de contratación en este comité antes de ser aprobadas por el Servicio Canario de Salud? La falta de información al respecto ha alimentado especulaciones y desconfianza entre la población.
Otro punto crítico es la destitución de la consejera Teresa Cruz y la directora del Servicio Canario de Salud. Ambas figuras fueron relevadas de sus cargos en un momento crítico, lo que ha llevado a cuestionar si su salida estuvo relacionada con la defensa de la sanidad pública y su capacidad para enfrentar la crisis. La percepción de que estas decisiones fueron tomadas sin un análisis adecuado ha dejado a muchos preguntándose si se priorizaron intereses políticos sobre la salud pública.
### La Trama del Caso Koldo y sus Implicaciones
El caso Koldo ha sido uno de los escándalos más sonados en la gestión de la crisis sanitaria. La relación entre la empresa Soluciones de Gestión y el ministro ha sido objeto de escrutinio. Se plantea la pregunta de si fue Koldo García quien recomendó a esta empresa o si la recomendación provino de otros actores, como el exministro Ábalos. La falta de claridad sobre quién impulsó esta contratación y cómo se llevó a cabo ha suscitado inquietudes sobre la transparencia en el proceso de selección de proveedores durante la crisis.
Además, la cuestión de si el presidente Torres se enteró del fiasco de las mascarillas por la prensa ha generado controversia. Torres ha afirmado que no conocía el escándalo de los 4 millones de euros hasta que fue publicado en mayo de 2022. Sin embargo, la pregunta persiste: ¿por qué no se le informó de esta situación crítica por parte de sus asesores y del director del SCS? La falta de comunicación interna en momentos de crisis puede tener consecuencias devastadoras, y esta situación no es la excepción.
La entrega de dinero a una empresa sin experiencia en compras sanitarias, como ocurrió en el caso de las mascarillas, plantea serias dudas sobre la gestión de recursos públicos. A pesar de que el SCS entregó el dinero sin garantías, el Gobierno mantuvo en su puesto al director del SCS, Conrado Domínguez, hasta noviembre de 2022. Esto ha llevado a cuestionar la responsabilidad de los líderes en la toma de decisiones y la rendición de cuentas en la administración pública.
### Encuentros y Relaciones Cuestionables
La relación entre Torres y Víctor de Aldama, un comisionista investigado, también ha sido objeto de atención. Aldama sostiene que se reunió con Torres, lo que plantea preguntas sobre la ética y la transparencia en las relaciones entre funcionarios públicos y actores privados. La posibilidad de que estas reuniones estuvieran relacionadas con negocios en el sector de hidrocarburos añade otra capa de complejidad a la situación.
La visita de Koldo García a Gran Canaria en febrero de 2022 y su relación con la empresa Levantina Ingeniería y Construcción también han suscitado interrogantes. La coincidencia de su estancia en el mismo hotel que el dueño de la empresa que ganó la licitación para la reforma del antiguo cine Royal plantea dudas sobre la transparencia en los procesos de licitación y contratación pública.
Finalmente, la dimisión de Antonio Olivera como jefe de gabinete ha sido presentada como una cuestión personal, pero muchos se preguntan si hay una conexión entre su salida y el caso Koldo. La falta de claridad en estas relaciones y decisiones ha alimentado la percepción de que hay más de lo que se revela públicamente.
La gestión de la crisis sanitaria en Canarias está marcada por una serie de decisiones controvertidas y relaciones cuestionables que han dejado a la ciudadanía con más preguntas que respuestas. La necesidad de una mayor transparencia y rendición de cuentas en la administración pública es más urgente que nunca, y las respuestas del ministro Torres serán fundamentales para restaurar la confianza en el sistema.