La situación de los menores migrantes en Canarias ha sido objeto de un exhaustivo análisis por parte de Amnistía Internacional, que ha puesto de manifiesto las deficiencias en la atención y protección de estos niños y niñas que llegan al archipiélago sin la compañía de un adulto responsable. En un informe titulado ‘A día de hoy no tengo nada’, presentado recientemente en una comisión parlamentaria, se han expuesto las graves fallas en el sistema de acogida, que se ven agravadas por la falta de coordinación entre las distintas administraciones involucradas.
**Condiciones de Acogida y Falta de Coordinación**
El informe destaca que la red de acogida en Canarias está sobresaturada, lo que ha llevado a la creación de macrocentros que no pueden garantizar el interés superior del menor. Estos dispositivos de emergencia, establecidos en 2021 para hacer frente al aumento de llegadas, no son capaces de ofrecer programas educativos individualizados ni de detectar vulnerabilidades específicas entre los jóvenes que allí residen. La responsable de investigación de Amnistía Internacional, Virginia Álvarez, subrayó que la falta de corresponsabilidad entre el Gobierno central y las comunidades autónomas ha sido un factor determinante en esta crisis.
La situación se complica aún más por la falta de formación adecuada entre el personal que trabaja en estos centros. Amnistía Internacional ha documentado casos de violencia contra los menores por parte de los trabajadores, lo que pone de relieve la necesidad urgente de mejorar la capacitación y los mecanismos de supervisión. La organización también ha señalado que es esencial establecer protocolos comunes entre las distintas provincias, ya que actualmente Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas operan de manera diferente, lo que contribuye a la descoordinación y a la ineficacia en la atención a estos menores.
**Derechos Vulnerados y Necesidades Específicas**
El informe también resalta que muchos de los menores que llegan a Canarias provienen de países en conflicto, como Mali y Sudán, o huyen de situaciones de violencia y esclavitud. Una vez que logran sobrevivir a una travesía peligrosa, se enfrentan a una nueva realidad que a menudo es igualmente dura. La falta de recursos adecuados para que los menores puedan presentar quejas de manera confidencial es un problema crítico, ya que muchos temen represalias si se atreven a hablar sobre sus experiencias.
Amnistía Internacional ha instado a las autoridades a garantizar que se realice una evaluación individualizada de cada menor, teniendo en cuenta su edad y sus circunstancias específicas. Esto es crucial para identificar las necesidades de protección internacional, ya que se estima que alrededor del 50% de los menores que llegan a las islas requieren este tipo de protección, según datos de ACNUR. Sin embargo, el informe indica que no se está cumpliendo con la debida diligencia en la identificación de estos niños y niñas, lo que puede llevar a situaciones peligrosas, como que menores terminen en centros para adultos.
La falta de personal especializado en la Policía también ha sido señalada como un obstáculo para una identificación más rápida y efectiva de los menores. La mejora en el sistema de atención es fundamental para evitar que se repitan situaciones de desprotección y vulneración de derechos.
Los grupos políticos en la Cámara regional han coincidido en que la atención a estos menores ha estado marcada por intereses partidistas, lo que ha impedido que se priorice el bienestar de los niños. La diputada del Partido Popular, María Saavedra, mencionó las mejoras implementadas, como la creación de nuevos equipos técnicos y el esfuerzo presupuestario, pero también reconoció que aún queda mucho por hacer. Por su parte, la diputada de Nueva Canarias, Natalia Santana, criticó directamente al Partido Popular por obstaculizar soluciones efectivas.
La necesidad de una política migratoria definitiva y humanitaria ha sido un tema recurrente en las discusiones. La diputada del PSOE, Elena Máñez, enfatizó que la reforma de la ley de extranjería es un paso necesario para garantizar una distribución equitativa de los menores entre las comunidades autónomas, especialmente aquellas que enfrentan una saturación en sus redes de acogida.
En este contexto, la diputada de Vox, Paula Jover, advirtió sobre el ‘efecto llamada’ y la importancia de no olvidar a los menores canarios, mientras que otros representantes han hecho un llamado a acabar con los discursos de odio que criminalizan a estos jóvenes que arriesgan sus vidas en busca de un futuro mejor. La atención a los menores migrantes en Canarias es un tema complejo que requiere un enfoque integral y coordinado, donde se priorice siempre el interés superior del menor y se garantice su protección y bienestar.