La situación de los menores migrantes no acompañados en España ha generado un intenso debate político y social, especialmente en comunidades como Canarias. La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha expresado su preocupación por la falta de cumplimiento de la ley por parte de algunas comunidades autónomas, lo que ha llevado a una situación de insumisión que, según ella, tiene raíces racistas. En este contexto, el Gobierno está decidido a avanzar con el reparto de estos menores, a pesar de los obstáculos que se presentan.
**La Urgencia de la Situación en Canarias**
Canarias se ha convertido en un punto crítico en la crisis migratoria, con un número significativo de menores no acompañados que requieren atención y protección. La ministra Rego ha señalado que el reparto de estos menores comenzará en verano, a pesar de las dificultades impuestas por el Partido Popular (PP) y otras fuerzas políticas que, según ella, están utilizando la ideología para obstaculizar los derechos de la infancia. La ministra ha enfatizado que la ley debe cumplirse y que el Gobierno está comprometido a trabajar con determinación para resolver esta situación.
Rego ha argumentado que el bloqueo que enfrenta el Gobierno es resultado de una agenda política que prioriza intereses partidistas sobre los derechos fundamentales de los menores. «Los tiempos políticos no son los mismos que la realidad», ha declarado, sugiriendo que la falta de acción ha causado un dolor significativo en la sociedad canaria. La ministra ha instado a las comunidades autónomas a colaborar y cumplir con la ley, destacando que la insumisión de algunas regiones es inaceptable.
**La Respuesta del Gobierno y el Futuro de los Menores**
El Gobierno ha presentado un real decreto que permite la distribución de menores migrantes entre las comunidades autónomas, pero enfrenta resistencia. Rego ha mencionado que algunas comunidades, como Aragón y Madrid, han llevado el asunto al Tribunal Constitucional, lo que podría retrasar el proceso de reparto. Sin embargo, la ministra ha asegurado que el Gobierno está preparado para aplicar la ley y que los traslados comenzarán en un plazo de dos meses.
La ministra también ha abordado la cuestión de la financiación estatal para apoyar a estas comunidades en la acogida de menores. Ha afirmado que el Estado destinará recursos para facilitar los traslados y el acompañamiento de los jóvenes migrantes, quienes, según datos, tienen un alto potencial de empleabilidad. Rego ha subrayado que casi el 70% de los menores migrantes no acompañados logran encontrar empleo, lo que representa una contribución positiva a la sociedad española.
Además, la ministra ha enfatizado la importancia de abordar la situación desde una perspectiva de derechos humanos, destacando que la acogida digna de estos menores es un valor fundamental que debe ser defendido por la sociedad. Rego ha instado a las comunidades autónomas a dejar de lado las disputas ideológicas y a centrarse en la protección de los derechos de los menores.
La situación actual plantea desafíos significativos, no solo en términos de recursos y logística, sino también en la necesidad de un enfoque humanitario que reconozca la complejidad del fenómeno migratorio. La ministra ha hecho un llamado a la empatía y a la solidaridad, recordando que muchos de estos menores han perdido a sus familias en el camino y que su bienestar debe ser una prioridad.
En resumen, el Gobierno está decidido a avanzar con el reparto de menores migrantes no acompañados, a pesar de los obstáculos políticos. La ministra Sira Rego ha dejado claro que la ley debe cumplirse y que la protección de los derechos de la infancia es una responsabilidad compartida que debe ser priorizada por todas las comunidades autónomas. La situación en Canarias es un reflejo de la necesidad urgente de abordar la crisis migratoria con un enfoque humano y solidario, que garantice la dignidad y el bienestar de los menores que buscan un futuro mejor.
