La crisis migratoria en Canarias ha cobrado una nueva dimensión en los últimos meses, especialmente en lo que respecta a la llegada de menores no acompañados. Este fenómeno ha suscitado preocupaciones tanto a nivel local como internacional, dado que miles de migrantes arriesgan sus vidas en peligrosas travesías por el Atlántico. En este contexto, es fundamental analizar las políticas actuales y los desafíos que enfrentan estos jóvenes en su búsqueda de un futuro mejor.
**El Aumento de Menores Migrantes en Canarias**
En los primeros nueve meses de 2025, más de 8,000 migrantes han llegado a las costas canarias, de los cuales un número significativo son menores de edad. La situación se ha vuelto crítica, ya que muchos de estos jóvenes llegan sin la compañía de un adulto, lo que plantea serias preguntas sobre su bienestar y protección. La llegada de estos menores ha llevado a las autoridades canarias a implementar medidas de emergencia para garantizar su atención y protección.
El Gobierno de Canarias ha expresado su preocupación por la falta de recursos y la necesidad de apoyo adicional del Estado español. Recientemente, se anunció que el Ministerio de Juventud e Infancia destinará 5 millones de euros para mejorar la atención a los menores migrantes. Sin embargo, muchos expertos advierten que esta cantidad es insuficiente para abordar la magnitud del problema.
**Desafíos en el Proceso de Traslado y Asilo**
Uno de los mayores desafíos que enfrenta el sistema de atención a menores migrantes es el proceso de traslado a la península. A pesar de que se han establecido procedimientos exprés para facilitar estos traslados, la realidad ha demostrado ser más complicada. Recientemente, se frustraron varios traslados debido a la confirmación de que algunos de los jóvenes eran mayores de edad, lo que ha generado frustración tanto en los migrantes como en las autoridades locales.
Además, la burocracia y la falta de coordinación entre las diferentes administraciones han llevado a que muchos menores se queden atrapados en un limbo administrativo. La directora general de Protección a la Infancia y las Familias del Gobierno de Canarias, Sandra Rodríguez, ha señalado que la demora en los traslados desalienta a los menores, quienes, tras esperar mucho tiempo, deciden no continuar su viaje hacia la península. Esta situación es alarmante, ya que muchos de estos jóvenes han expresado su deseo de buscar asilo y una vida mejor en el continente.
La situación se complica aún más por el hecho de que muchos de estos menores alcanzan la mayoría de edad mientras esperan su traslado. Esto no solo afecta su estatus legal, sino que también los deja vulnerables a caer fuera del sistema de protección internacional. La consejera de Bienestar Social, Candelaria Delgado, ha enfatizado la necesidad de garantizar que estos jóvenes, a pesar de haber cumplido 18 años, sigan recibiendo la atención y protección que necesitan.
**Violencia y Abusos en la Ruta Migratoria**
La crisis migratoria en Canarias no puede ser entendida sin considerar la violencia y los abusos que enfrentan los migrantes en su camino. La ruta canaria, considerada una de las más peligrosas del mundo, ha sido objeto de críticas por parte de organizaciones internacionales que alertan sobre las condiciones inhumanas que enfrentan los migrantes en su travesía. La colaboración entre España y países como Mauritania ha sido cuestionada, ya que muchos expertos argumentan que estas políticas de externalización de fronteras perpetúan la violencia en lugar de resolverla.
A pesar de la disminución en el número de llegadas de migrantes desde Mauritania, que ha caído un 52% en comparación con el año anterior, las condiciones en los centros de detención y los abusos en los controles migratorios siguen siendo motivo de preocupación. Organizaciones como Human Rights Watch han denunciado que los controles migratorios, financiados con fondos europeos, a menudo resultan en violaciones de derechos humanos.
**La Respuesta de la Sociedad Civil**
Ante esta crisis, la sociedad civil ha comenzado a movilizarse para ofrecer apoyo a los migrantes. Diferentes organizaciones no gubernamentales están trabajando para proporcionar asistencia legal, psicológica y social a los menores no acompañados. Estas iniciativas son cruciales para garantizar que los derechos de los migrantes sean respetados y que reciban la atención que necesitan.
La situación de los menores migrantes en Canarias es un reflejo de una crisis más amplia que afecta a Europa y al mundo. A medida que las políticas migratorias se endurecen y las fronteras se cierran, es fundamental que se priorice la protección de los derechos de los migrantes, especialmente de aquellos que son más vulnerables. La atención a los menores no acompañados debe ser una prioridad, y es responsabilidad de todos garantizar que su bienestar y derechos sean protegidos en todo momento.