La situación política en Canarias se ha vuelto tensa tras la reciente escisión de 22 concejales de Nueva Canarias (NC), quienes han decidido abandonar la formación para unirse a un nuevo partido, Municipalistas Primero Canarias. Este movimiento ha generado un debate intenso sobre el transfuguismo y la lealtad política, especialmente a la luz de una sentencia del Tribunal Constitucional que podría influir en el futuro de estos ediles.
### El Contexto de la Escisión
La crisis comenzó en abril de 2025, cuando un grupo significativo de concejales de Gran Canaria decidió dejar NC para unirse a un nuevo proyecto político liderado por los alcaldes Teodoro Sosa y Óscar Hernández. Esta decisión ha sido calificada por NC como un acto de transfuguismo, ya que los concejales no han renunciado a sus actas, lo que les permite mantener sus cargos públicos hasta las próximas elecciones municipales en 2027. Desde NC, se argumenta que este comportamiento es poco ético y contradictorio, dado que los concejales ya no son miembros activos del partido.
La situación se complica aún más con la referencia a una sentencia del Tribunal Constitucional que, en un caso similar en La Gomera, permitió que dos ediles del PSOE, que habían sido expulsados, pasaran al grupo de no adscritos sin perder sus ingresos. Esta sentencia se ha convertido en un punto de apoyo para los concejales disidentes, quienes argumentan que su situación es diferente y que no deben ser considerados tránsfugas.
Luis Campos, portavoz de NC, ha dejado claro que el partido actuará de manera firme y sin distinciones, independientemente de si los concejales se encuentran en la oposición o en el gobierno. Esto implica que, si se confirma su estatus de tránsfugas, serán trasladados al grupo de no adscritos, lo que les permitirá seguir en el gobierno, pero sin el respaldo de NC.
### Reacciones y Estrategias de Nueva Canarias
Ante esta crisis, NC ha decidido tomar medidas drásticas. La formación ha dado un plazo a los concejales para que entreguen sus actas, y ha anunciado que, si no lo hacen, procederá a comunicar a los ayuntamientos que ya no forman parte del partido. Esta estrategia busca dejar claro que NC no tolerará lo que consideran un comportamiento desleal y que actuará en consecuencia para proteger su imagen y su estructura organizativa.
El partido también ha enfatizado la importancia de mantener los acuerdos de gobierno en los municipios donde aún tienen representación. Campos ha señalado que, en muchos casos, la alternativa a su permanencia en el gobierno podría ser un ascenso de la derecha, lo que podría tener consecuencias negativas para la política local. Esta postura refleja una preocupación por el equilibrio de poder en las corporaciones municipales y la necesidad de mantener una voz progresista en el gobierno.
Mientras tanto, el nuevo partido, Municipalistas Primero Canarias, ha comenzado a establecerse en 18 municipios de Gran Canaria y busca expandir su influencia a otras islas. Este crecimiento ha sido rápido y ha generado un interés considerable entre los votantes que buscan una alternativa a los partidos tradicionales. La escisión ha puesto de manifiesto la fragmentación del panorama político en Canarias y la búsqueda de nuevas identidades políticas que resuenen con las necesidades de la población.
La situación actual plantea interrogantes sobre el futuro de NC y su capacidad para recuperarse de esta crisis. El próximo VI Congreso Nacional de la formación, programado para julio, será un momento crucial para definir su dirección y estrategia. Román Rodríguez, líder de NC, ha expresado su intención de continuar al frente del partido, siempre que cuente con el apoyo de la militancia. Este congreso se presenta como una oportunidad para renovar la dirección del partido, con un enfoque en la juventud, el feminismo y la actualización de su proyecto nacionalista de izquierdas.
En este contexto, se espera que se discutan propuestas clave que aborden temas como la vivienda, la neutralidad y la solidaridad internacional. La participación de 300 delegados de todo el archipiélago en este congreso es un indicativo de la importancia que tiene para la formación y su futuro.
La crisis de NC y la escisión de sus concejales subrayan la complejidad de la política canaria actual. A medida que los partidos buscan adaptarse a un electorado cambiante y a nuevas realidades sociales, la lucha por el control municipal se intensifica, y los próximos meses serán decisivos para determinar quiénes se quedarán y quiénes se irán en este panorama político en constante evolución.
