Argentina se encuentra en la antesala de unas elecciones legislativas que se celebrarán el próximo 26 de octubre, marcando un momento crucial para el presidente Javier Milei. Este evento electoral se presenta como una prueba de fuego para el mandatario, quien ha sido objeto de críticas y controversias desde su llegada al poder. En estas elecciones, se renovarán 127 de los 257 escaños de la Cámara de Diputados y 24 de los 72 escaños del Senado, lo que podría definir el rumbo político del país en los próximos años.
La situación política en Argentina es tensa y polarizada. Las encuestas más recientes indican que la coalición de Milei, La Libertad Avanza, mantiene una ligera ventaja sobre la principal oposición, Fuerza Patria, que representa al kirchnerismo. Sin embargo, esta ventaja es mínima y ha fluctuado en las últimas semanas, lo que sugiere que la contienda electoral será reñida. Según un sondeo de Rubikon, La Libertad Avanza obtendría un 34,6% de los votos, frente al 32,2% de Fuerza Patria, mientras que otras fuerzas políticas como Provincias Unidas y el Frente de Izquierda se quedan atrás con porcentajes mucho menores.
La provincia de Buenos Aires, que alberga más del 40% del padrón electoral, se convierte en un campo de batalla clave para ambos partidos. Las proyecciones indican que Fuerza Patria podría obtener un 42,3% de los votos en esta región, lo que representaría una ventaja significativa sobre La Libertad Avanza. Este escenario se complica aún más para Milei, ya que su candidato en Buenos Aires, José Luis Espert, ha estado envuelto en un escándalo relacionado con un presunto narcotraficante, lo que podría afectar su imagen y la de su coalición.
### La polarización política y sus implicaciones
La polarización en Argentina ha alcanzado niveles alarmantes, y las elecciones legislativas no son la excepción. La coalición oficialista, La Libertad Avanza, busca consolidar su poder en el Congreso para evitar un posible juicio político contra Milei, que podría surgir si los resultados no son favorables. Por otro lado, Fuerza Patria se presenta como una alternativa viable para las elecciones presidenciales de 2027, con el objetivo de ganar más espacio en el Congreso y consolidar su influencia política.
En este contexto, Provincias Unidas, un partido centrista, intenta posicionarse como una opción que podría atraer a votantes cansados de la polarización extrema entre Milei y el kirchnerismo. La entrada de figuras como Juan Schiaretti, exgobernador de Córdoba, en la Cámara baja, ha alimentado especulaciones sobre su posible ascenso a la presidencia provisional si Milei no logra mantener el control político.
El Frente de Izquierda, aunque con una representación menor, también espera mantener su presencia en el Congreso en un ambiente de polarización. Actualmente, cuenta con cinco diputados y su objetivo es no perder esa cifra en las próximas elecciones, a pesar de la competencia feroz entre las fuerzas más grandes.
### La caída de la popularidad de Javier Milei
Más allá de las proyecciones electorales, la popularidad de Javier Milei ha mostrado signos de desgaste. Un sondeo reciente de la consultora Zuban Córdoba reveló que su imagen negativa ha alcanzado el 63,2%. Este dato es alarmante para su administración, ya que un 56,7% de los encuestados cree que La Libertad Avanza perderá las elecciones legislativas. Además, un 27,4% opina que el presidente debería dimitir si los resultados son desastrosos.
El clima de descontento se refleja en otros estudios, como el de Management & Fit, que indica que la aceptación de Milei se sitúa en un 37,4%, mientras que el rechazo alcanza el 47,9%. Estos números son preocupantes para un presidente que llegó al poder con la promesa de un cambio radical en la política argentina, pero que ahora enfrenta una creciente oposición y un electorado cada vez más escéptico.
La situación política en Argentina es volátil y las elecciones legislativas del 26 de octubre serán un termómetro crucial para medir la viabilidad del gobierno de Milei. La capacidad de su coalición para mantener el control del Congreso podría determinar no solo su futuro político, sino también el rumbo del país en un momento de crisis económica y social. Las próximas semanas serán decisivas y todos los ojos estarán puestos en el resultado de estas elecciones, que podrían cambiar el panorama político argentino de manera significativa.
