La Consejería de Empleo del Gobierno de Canarias ha decidido implementar un plan de choque para abordar el significativo retraso en la resolución de expedientes de conciliación laboral. Actualmente, más de 3.000 casos están pendientes en el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (Semac), lo que ha generado preocupación tanto entre trabajadores como empleadores. Este organismo es crucial para resolver conflictos laborales, como despidos sin acuerdo, antes de que las partes opten por la vía judicial.
### La Situación Actual en el Semac
El Semac enfrenta un grave problema de congestión, con un promedio de 22.000 expedientes tramitados anualmente, lo que se traduce en aproximadamente 88 casos diarios. Sin embargo, la plantilla actual solo cuenta con tres letrados conciliadores, lo que ha llevado a que muchos expedientes se prolonguen durante casi un año, cuando el tiempo estipulado para su resolución es de un mes. Esta situación no solo afecta a los trabajadores, quienes pueden perder su derecho a presentar una demanda si el proceso se alarga demasiado, sino que también impacta en la percepción de justicia y eficiencia del sistema laboral en Canarias.
El director de Trabajo, José Ramón Rodríguez, ha señalado que el atasco no es un problema nuevo, sino que ha sido una constante en la última década, atribuible a la falta de personal. La Consejería de Empleo, bajo la dirección de la consejera Jéssica de León, ha decidido actuar de inmediato para mejorar esta situación. La propuesta incluye un aumento significativo en el número de letrados conciliadores, pasando de tres a siete, así como la incorporación de diez administrativos que apoyen en las tareas auxiliares.
### Plan de Choque y Recursos Asignados
El plan de choque que se activará tiene como objetivo resolver los expedientes pendientes en un plazo de quince días. Para ello, se destinarán dos millones de euros a la contratación de nuevos letrados y administrativos. De los siete letrados que se incorporarán, tres estarán ubicados en Las Palmas de Gran Canaria y cuatro en Santa Cruz de Tenerife, lo que permitirá una mejor distribución de los recursos y una atención más efectiva a los casos.
Rodríguez ha enfatizado que la intención de la Consejería es ofrecer el mejor servicio posible a los ciudadanos, asegurando que los trabajadores puedan recibir las cantidades adeudadas por sus empleadores sin demoras innecesarias. Aunque los trabajadores pueden acceder a prestaciones por desempleo durante el proceso de conciliación, la falta de resolución rápida puede generar incertidumbre y estrés adicional.
La implementación de este plan de choque se llevará a cabo durante un periodo de tres años, lo que permitirá evaluar su efectividad y realizar ajustes según sea necesario. La Consejería espera que, con estos cambios, se logre no solo reducir el número de expedientes pendientes, sino también mejorar la satisfacción de los usuarios del Semac.
Además, la Consejería de Empleo ha subrayado la importancia de la mediación y la conciliación como herramientas para resolver conflictos laborales de manera pacífica y eficiente. Al agilizar estos procesos, se espera que se reduzcan los casos que llegan a la vía judicial, lo que beneficiaría a ambas partes involucradas en el conflicto.
El compromiso del Gobierno de Canarias con la mejora del sistema de conciliación laboral es un paso positivo hacia la modernización de los servicios públicos y la atención a las necesidades de los trabajadores y empleadores. La implementación de este plan de choque es un indicativo de que se están tomando medidas concretas para abordar problemas que han persistido durante años, y que afectan directamente a la calidad de vida de los ciudadanos.
Con la llegada de nuevos letrados y administrativos, se espera que el Semac pueda manejar de manera más eficiente el volumen de casos que recibe, permitiendo que los trabajadores obtengan respuestas rápidas y efectivas a sus reclamaciones. La Consejería de Empleo está decidida a transformar la experiencia de los usuarios del Semac, asegurando que cada expediente sea tratado con la urgencia y el respeto que merece. Este enfoque proactivo podría marcar un cambio significativo en la forma en que se gestionan los conflictos laborales en Canarias, estableciendo un precedente para futuras reformas en el sistema laboral.