La reciente muerte del papa Francisco ha reavivado las tensiones entre Israel y el Vaticano, un conflicto que ha estado presente durante años, especialmente en el contexto del conflicto israelo-palestino. A pesar de que el pontífice fue conocido por su enfoque humanitario y su llamado a la paz, su postura crítica hacia las acciones de Israel en Gaza ha dejado una huella profunda en las relaciones diplomáticas entre ambas partes.
La respuesta de Israel a la muerte del papa Francisco ha sido notablemente fría. Mientras que muchos países han enviado a sus líderes para rendir homenaje, Israel ha optado por una representación mínima, enviando solo a su embajador en el Vaticano. Esta decisión ha sido interpretada como un reflejo del deterioro de las relaciones bilaterales, especialmente desde el inicio de la guerra en Gaza en 2023. Fuentes diplomáticas han señalado que este es un punto bajo en la historia de las relaciones entre Israel y la Santa Sede.
El papa Francisco, durante su papado, no dudó en expresar su preocupación por la situación en Gaza, describiendo las acciones israelíes como genocidio. En sus discursos, hizo un llamado constante a la paz y a la liberación de los rehenes, lo que le valió tanto admiración como críticas. Su enfoque directo y su disposición a hablar sobre la crisis humanitaria en Gaza rompieron con la tradicional neutralidad de la Santa Sede, lo que generó una reacción adversa por parte de las autoridades israelíes.
### La Reacción de Israel ante la Muerte del Papa
La muerte del papa Francisco ha llevado a Israel a eliminar publicaciones de condolencias en sus redes sociales, lo que ha suscitado críticas y especulaciones sobre la imagen del país en el ámbito internacional. Funcionarios del Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel han calificado la publicación de condolencias como un «error», lo que ha llevado a una serie de decisiones internas para minimizar la representación en el funeral del pontífice. Esta actitud ha sido vista como un intento de evitar un mayor aislamiento internacional, especialmente en naciones con una población católica significativa.
El presidente de Israel, Isaac Herzog, fue uno de los pocos funcionarios que se pronunció públicamente tras la muerte del papa, describiéndolo como un «hombre de profunda fe y compasión ilimitada». Sin embargo, la falta de un mensaje más contundente por parte del primer ministro Binyamín Netanyahu ha dejado a muchos preguntándose sobre la verdadera postura de Israel hacia el Vaticano y la figura del papa Francisco.
El papa Francisco había mantenido un contacto cercano con la comunidad cristiana en Gaza, realizando videollamadas nocturnas a los fieles, quienes se reunían en la única iglesia católica de la Franja. Este gesto humanitario fue un intento de brindar apoyo espiritual en medio de la devastación. La situación en Gaza es alarmante, con un 92% de las viviendas dañadas o destruidas, lo que ha llevado a miles de personas a vivir en condiciones precarias.
### La Influencia del Papa Francisco en el Conflicto
A lo largo de su papado, Francisco se ha convertido en una voz influyente en la discusión sobre el conflicto israelo-palestino. Su postura ha sido clara: aboga por la paz y la reconciliación, pero también ha sido firme en su crítica hacia las acciones que considera injustas. En su último discurso, el papa expresó su cercanía al sufrimiento de los cristianos en Palestina y de todos los pueblos afectados por el conflicto. Su llamado a un alto el fuego y a la liberación de los cautivos resonó en un momento crítico, justo antes de su fallecimiento.
Los defensores del papa argumentan que su enfoque hacia el pueblo palestino no solo refleja un compromiso con la paz, sino también una profunda empatía por el sufrimiento humano. Desde sus días como arzobispo de Buenos Aires, Francisco ha mantenido relaciones con la comunidad judía, lo que le ha permitido tener una perspectiva más amplia sobre el conflicto. Sin embargo, su decisión de hablar abiertamente sobre la crisis en Gaza ha generado tensiones con el gobierno israelí, que ha visto sus comentarios como una intromisión en asuntos internos.
La muerte del papa Francisco marca un momento crucial en las relaciones entre Israel y el Vaticano. A medida que el mundo observa cómo se desarrollan estas tensiones, la figura del papa Francisco seguirá siendo un símbolo de esperanza para muchos, mientras que para otros, su legado podría ser visto como un punto de discordia en un conflicto que parece no tener fin. La historia de su papado y su enfoque hacia el conflicto israelo-palestino dejarán una marca indeleble en la diplomacia internacional y en la búsqueda de la paz en la región.