Los aeropuertos de Canarias se están preparando para la implementación de un nuevo sistema de control de fronteras que comenzará a funcionar el 12 de octubre de 2025. Este sistema, conocido como Entry-Exit System (EES), tiene como objetivo registrar las entradas y salidas de ciudadanos de terceros países en el Espacio Schengen. La iniciativa de la Unión Europea busca modernizar los procedimientos de control fronterizo, eliminando la necesidad de sellar pasaportes y utilizando tecnología avanzada para escanear documentos y tomar datos biométricos de los viajeros.
### La Implementación del Sistema EES
El nuevo sistema de control de fronteras se activará de manera progresiva, con una inversión significativa de 83 millones de euros por parte del Ministerio del Interior para equipar los aeropuertos españoles. En Canarias, se instalarán un total de 306 equipos automatizados, además de reforzar los puestos de control manual. Este esfuerzo incluye 113 puestos de control manual y 208 cabinas del Sistema de Control Automático de Fronteras (ABC).
Cada aeropuerto en las islas tendrá un dispositivo adaptado a su volumen de tráfico. Por ejemplo, el Aeropuerto de Gran Canaria contará con 34 puestos de control manual, 84 equipos automatizados y 55 cabinas ABC. En el Aeropuerto Reina Sofía de Tenerife Sur, se instalarán 31 puestos de control manual y 84 equipos automatizados. En contraste, el Aeropuerto de Tenerife Norte, que maneja menos tráfico de pasajeros extracomunitarios, tendrá un número reducido de equipos.
La implementación de este sistema busca mejorar la seguridad y el control en las fronteras del archipiélago, pero también plantea desafíos significativos. A partir del 10 de abril de 2026, se espera que todo el control de pasajeros se realice de manera automatizada, lo que podría generar aglomeraciones si no se gestiona adecuadamente.
### Preocupaciones del Sector Turístico
El nuevo sistema ha suscitado inquietudes entre los empresarios turísticos de Canarias, especialmente en Tenerife, que depende en gran medida del turismo británico. Santiago Sesé, presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, ha expresado su apoyo a la implementación del EES, pero también ha señalado que los aeropuertos no están preparados para un cambio de esta magnitud en un plazo tan corto. Las experiencias pasadas, especialmente desde el Brexit, han demostrado que las infraestructuras actuales son insuficientes para manejar el volumen de pasajeros.
Sesé ha destacado que las aglomeraciones en los aeropuertos, particularmente en el Aeropuerto de Tenerife Sur, han deteriorado la experiencia de los turistas que llegan a las islas. La falta de recursos humanos y la infraestructura inadecuada han llevado a situaciones de descontrol, lo que afecta negativamente la imagen que los visitantes tienen de Canarias. «A menos que este proceso se implemente de manera efectiva, tememos que resultará en aún más aglomeraciones y una peor impresión para el turista», afirmó.
Además, el presidente de la Cámara de Comercio ha enfatizado la necesidad de una inyección económica para mejorar las instalaciones aeroportuarias. La importancia del turismo británico, que representa una parte significativa de los visitantes a las islas, no ha sido reflejada en las inversiones necesarias para adaptar los aeropuertos a las nuevas realidades post-Brexit. La falta de preparación podría dar lugar a una percepción de descontrol en comparación con otros destinos turísticos competidores en el Caribe y el Mediterráneo.
La implementación del EES tiene el potencial de ser positiva, pero solo si se toman las medidas adecuadas para garantizar que los aeropuertos puedan manejar el aumento en el volumen de pasajeros de manera eficiente. Los empresarios turísticos han hecho un llamado a las autoridades para que se aseguren de que las infraestructuras y los recursos estén en su lugar antes de la activación del nuevo sistema.
La situación actual plantea un dilema para las autoridades y los empresarios turísticos en Canarias. Mientras que el EES promete modernizar el control fronterizo y mejorar la seguridad, también es crucial que se aborden las preocupaciones sobre la capacidad de los aeropuertos para manejar el flujo de pasajeros. La colaboración entre el gobierno y el sector privado será esencial para garantizar que la transición a este nuevo sistema sea lo más fluida posible, minimizando el impacto en la experiencia del turista y asegurando que Canarias siga siendo un destino atractivo y accesible.